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¡Chalecos amarillos!

Alan Smith
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© © kenny1 | Shutterstock.com

¡Chalecos amarillos! (Puede que vengan acompañados de una niebla roja)

 

¡Fin de semana de Pascua y sol ardiente! ¿En Gran Bretaña?

¿Calentamiento global?

 

Ciertamente, el grupo “rebelión de la extinción” así lo cree.

 

Este fin de semana ha habido un poco de ambiente de carnaval en la capital británica, ya que 1.000 manifestantes, bien educados, han sido culpables de interrumpir los trayectos  por  Londres.

 

La policía, al ocupar puestos en Westminster, Oxford Street y en Waterloo Bridge, se ha movido para arrestar a más de 1.000 de ellos en una ofensiva muy suave.

De hecho, muchos de los "jefes" de la policía han estado preocupados por la forma divertida como se llevó a cabo la intervención entre los policías y los manifestantes. La Comandante de la Policía Metropolitana, Jane Connors, dijo que estaba "decepcionada" por un video que mostraba a oficiales bailando con manifestantes.

 

Ella dijo: "Estoy decepcionada por el video y el comportamiento inaceptable de los oficiales que se observa en él mismo. Esperamos que nuestros oficiales  respeten a  los manifestantes, pero claramente, sus acciones no llegan al tono de la operación policial en un momento en que la población está frustrada con las acciones de los manifestantes (debido al corte del tráfico). Recordaremos a los oficiales sus responsabilidades y expectativas en la vigilancia de esta operación; sin embargo, la mayoría de los oficiales han trabajado largas horas y les agradezco su continuo compromiso".

 

Compare esto con los Gendarmes en París y cómo han estado lidiando con el Jaune de Gilet.

 

La policía francesa, conocida por sus acciones bruscas, ha sido acusada de avivar las llamas de los coches y edificios,  por el uso de gases lacrimógenos y granadas de aturdimiento.

 

Ahora, por supuesto, las dos protestas son por razones completamente diferentes; una es sobre el daño que estamos haciendo a nuestro planeta, que muchos creen que nuestra descendencia mirará hacia atrás (si sobrevivimos) con horror. La otra protesta es sobre el combustible y la reforma económica.

Este fin de semana se preguntó a un portavoz de la policía británica sobre la actitud de los policías y sobre cómo  se la componían para manejar las protestas.

Su opinión, y tengo que estar de acuerdo con él, es que, si es posible, sería mucho mejor tratar a los manifestantes con respeto y tratar de no inflamar la situación con mano dura.

 

Los negociadores capacitados saben que aumentar la tensión al ser competitivos, agresivos e irrespetuosos no ayudará a nadie. El comportamiento violento engendra violencia. El enigma es qué lado lo inicia. Cualquiera que sea, lo más probable es que la otra parte reaccione de igual manera. Las posturas competitivas generan posturas competitivas.

 

Aunque amo a los franceses, creo que preferiría a nuestra policía británica en cualquier momento.

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